Información de salud


Trasplante de médula ósea: la internación

Mientras se prepara para un trasplante de médula ósea, quizás esté preocupado e inseguro sobre lo que puede suceder. Si la internación en el hospital le genera ansiedad, es completamente normal. Prepararse le servirá para calmar sus miedos. En este artículo, encontrará información básica sobre la internación. También hay consejos sobre qué debe llevar al hospital y cómo puede lograr la mayor comodidad durante estos momentos.

¿Qué es una internación?

La internación implica pasar la noche en el hospital. El equipo de atención le informará cuánto tiempo podría ser. La mayoría de las personas que reciben un trasplante de médula ósea permanecen en el hospital por lo menos algunas semanas. La duración de la internación dependerá de cómo salga el trasplante y de cómo responda su cuerpo.

Tendrá una habitación privada durante toda la internación. Su sistema inmunitario será incapaz de combatir infecciones nuevas durante este período debido a los tratamientos del trasplante. Entonces, tener su propia habitación reduce el riesgo de infección. Si bien puede hacerlo sentir solo, es necesario para su seguridad. La habitación también puede tener un sistema de aire especial para que no entre aire contaminado.

¿Qué puede suceder durante la internación?

Preparativos para el trasplante

La primera parte de la internación consiste en un tratamiento previo al trasplante, como quimioterapia o radioterapia. Esto se llama acondicionamiento. Con estos tratamientos, se prepara el cuerpo para que acepte células madre nuevas. El tipo exacto de tratamiento que reciba depende del diagnóstico y del plan de atención general. Es posible que tenga efectos secundarios a corto plazo comunes de la quimioterapia y de la radioterapia. El equipo de atención médica estará a disposición para brindarle ayuda mientras se recupera.

El trasplante

Una vez finalizado el tratamiento previo al trasplante, pasará a la fase de trasplante. El trasplante de médula ósea consiste en la administración de células madre nuevas a través de un catéter venoso central. El catéter es un tubo largo y flexible que se coloca en una vena grande del tórax. Permite que las células madre nuevas lleguen a la médula ósea a través del torrente sanguíneo. Una vez que las células madre llegan a la médula ósea, deberían empezar a crear glóbulos sanos nuevos.

Lo más probable es que esté despierto y en la cama del hospital durante el trasplante. Le darán medicamentos para los efectos secundarios. Muchos de los efectos secundarios se deben al agente conservante que se usa si se congelan las células madre. Puede sentir un sabor fuerte a ajo o a crema de maíz en la boca. Puede aliviar esto con jugos de fruta, paletas heladas o caramelos duros. También es posible que tenga este olor en el cuerpo durante unos días. Pero desaparece de a poco. El equipo de atención hará todo lo posible para mantener su comodidad.

Después del trasplante

Mientras se recupera del trasplante, estará en observación estricta por parte del equipo de atención. Pasarán a revisarlo de forma periódica y le harán análisis de sangre y otras pruebas cada pocas horas. Esto se hace para asegurarse de que el cuerpo acepta las células madre nuevas y de que la médula ósea produce glóbulos nuevos. Por lo general, volver a tener un recuento sanguíneo normal tarda entre 2 y 6 semanas. Los recuentos sanguíneos pueden tardar de 6 a 12 meses o más en aproximarse a la normalidad. También para que el sistema inmunitario funcione bien.

Tendrá que tener precaución de evitar las infecciones. Durante ese período, el cuerpo es muy vulnerable a los microbios. Es posible que le den antibióticos para prevenir las infecciones. Lo más probable es que tenga una dieta especial. También deberá prestar más atención a la higiene corporal y bucal durante la internación. El equipo de atención le dará indicaciones al respecto antes de que ingrese al hospital.

Consejos sobre qué llevar

El equipo de atención debe darle una lista completa de los artículos que debe llevar para la internación. Estas son algunas sugerencias frecuentes:

  • Ropa cómoda y abrigada, como pijamas, pantalones y pulóveres deportivos de algodón

  • Muchos calcetines y ropa interior

  • Gorro y pantuflas

  • Una bata abrigada

  • Elementos que lo ayuden a pasar el tiempo, como libros, juegos de palabras y rompecabezas

  • Teléfono celular y cargador

  • Dispositivos electrónicos para escuchar música o ver televisión

  • Fotos de familiares y amigos

También le darán una lista de artículos que no debe llevar. Por ejemplo, plantas, flores, algunos alimentos y determinados productos de cuidado personal. Consulte con el equipo de atención médica para obtener más información.

Asegúrese de disponer de tiempo suficiente para prepararse para la internación, tanto mental como logísticamente. Si le resulta abrumador, pida ayuda a un miembro de la familia o a un amigo con la lista de artículos.

Planifique las visitas

Lo más probable es que solo le permitan recibir una cantidad reducida de visitas durante la internación. Podría permitirse solo al cuidador principal. Pregunte sobre la política de visitas antes de internarse. Así, podrá organizarse con sus seres queridos. Por lo general, no se permite la visita de niños menores de cierta edad. Depende del plan de tratamiento y de las políticas del hospital. También es conveniente que limite el contacto con microbios o posibles infecciones. Las visitas no deben acudir si están enfermas. También es posible que deban usar un equipo de protección personal para mantener su seguridad. Esto puede incluir una mascarilla, una bata o guantes. Recuerde que todo esto es para brindarle las mejores probabilidades de una buena recuperación.

Encuentre apoyo

Cuando la internación es prolongada, puede sentir que su vida está en suspenso. Eso es comprensible. Cuando sus seres queridos no pueden brindar consuelo en persona, se siente la soledad. Pero hay muchas formas de encontrar apoyo y seguir conectado mientras está en el hospital. Estos son algunos ejemplos:

  • Manténgase en contacto regular con el equipo de atención. No tema hacer preguntas ni consultar inquietudes. Están para brindarle ayuda durante todo el proceso.

  • Elija un cuidador principal antes de ingresar al hospital. Esta persona deberá conocer el plan de tratamiento completo. Lo ayudará con los cuidados cuando llegue a casa.

  • Únase a un grupo de apoyo para pacientes. O comuníquese con personas que hayan estado internadas para recibir tratamiento. Pueden brindarle recomendaciones y consejos útiles. Hay grupos de apoyo presenciales y en línea.

  • Use el teléfono para enviar mensajes de texto o correos electrónicos, hacer llamadas o grabar actualizaciones en video para sus seres queridos. Pídales que graben audios o videos para reproducirlos cuando se sienta solo.

  • Decore la habitación del hospital con fotos de familiares y amigos.

  • Haga todo lo posible por controlar el estrés, la tristeza o la frustración que sienta. La meditación, los ejercicios de respiración y otras herramientas de consciencia plena (mindfulness) pueden ser útiles. Es posible que en el centro de tratamiento haya un consejero, un trabajador social o un capellán que puedan ofrecer apoyo.

Sobre todo, tenga paciencia con usted y con su cuerpo. Intente tener esperanza y una actitud positiva. Sepa que cuenta con el apoyo del equipo de atención médica y de sus seres queridos.

© 2000-2024 The StayWell Company, LLC. All rights reserved. This information is not intended as a substitute for professional medical care. Always follow your healthcare professional's instructions.
Powered by Krames by WebMD Ignite